Terminaba el partido de Boca ante Argentinos Juniors y empezaba a jugar River y Banfield cuando se me cruzaba por la cabeza lo bueno que es volver a ver los partidos por la tele y que todo aquel que tenga televisor, sea de la clase económica que sea, pueda hacer lo mismo. Volver a escuchar a varios grandes, censurados por los multimedios, los cuales nos alegraban las tardes de los domingos como ser Alejandro Apo (trabajando siempre junto a Victor Hugo), o el “estoy creizy Macaya” de Marcelo Araujo entre otros. Cada partido con un relator y un comentarista distinto sin esas maratones donde un mismo relator estaba en tres partidos por fin de semana.
Con todo esto me pregunto, ¿que lleva a decir a los empleados de los multimedios que la intervención del Estado en el futbol es incorrecta, demagógica, pésima, etc.?, donde hasta la Sociedad Rural tomaba intervención a favor de TyC. Claro… me olvidaba que el dicho dice: “que entre bueyes no hay cornadas…”
¡Como pueden decir!, que esto lleva a disminuir los puestos de trabajo cuando a las claras queda que se han aumentado y se baraja y se da de nuevo.
Donde cuestionan porque el Estado invierte 600 millones de pesos en un mísero deporte, pero aquellos que dicen esto se olvidan que el importe inicial que el Estado pone a disposición de los clubes es una inversión a corto plazo ya que en menos de dos meses se recupera con los ingresos que generan la publicidad y los derechos transferidos. También se olvidan que la mitad de los beneficios que se obtengan se los lleva la secretaría de deportes de la Nación para invertirlos en deportes olímpicos que se encuentran faltos de sponsors. Que se ha colaborado en el saneamiento parcial de las deudas que los clubes tenían con los jugadores que en síntesis son los reales protagonistas junto con los hinchas.
Sigo preguntándome si nos creen tan obsecuentes con los multimedios (defensores acérrimos de los intereses económicos de los poderosos) como para hacernos eco de las incongruencias que fomentan. Cuanto más temas podamos discernir nosotros mismos, más allá de los medios y de las presiones que nos impongan, mejor será nuestra sociedad.
Christian Hervias
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