miércoles, 14 de octubre de 2009

MÁS VALE HACER QUE DECIR


Pasó otro aniversario de nuestra ciudad y releyendo la página oficial de la municipalidad nos encontramos con la transcripción de las palabras dichas por nuestro intendente en el tradicional discurso con el título:

“HAY QUE TERMINAR CON LOS ANTAGONISMOS”.


Y no podemos dejar de expresar algo de lo que sentimos cuando releemos las palabras del mandatario.

El primer comentario no puede ser otro que el del título elegido, frase que puesta en la boca de quien la dijo nos parece una burla para todos los vecinos. Nosotros coincidimos que los antagonismos no nos llevan a nada y es por eso que decidimos el camino de andar sobre las coincidencias remarcando lo que nos une y dejando de lado las cosas en las que no hallamos el punto de unión hasta encontrarlo.

Justamente este aspecto es uno a corregir por la actual gestión ya que se la pasa dividiendo a los vecinos y etiquetándolos hasta a los que los une la misma necesidad.

Sino revisemos por ejemplo, la ( si se puede decir ) actuación de su gestión con el tema de tierras. Que los legales, que los ilegales, que los “intrusos”, que los asociados o agremiados, que los del listado, que los que tienen prioridades sociales, y dentro de las categorias las subcategorias no es lo mismo “un intruso” de Andorra que uno de la Bolsita o del Escondido ni es lo mismo los del Sutef que cualquier otra cooperativa o asociación en el mismo Barrio Alakalufes, o todo el barrio no es lo mismo que las asociaciones inscriptas a la espera de una solución. Todas estas etiquetas son fruto y resultado de la intervención del Intendente, aunque el derecho que les cabe es el mismo y lo que exigen todos, también. Desde que se cerró la secretaría de tierras municipal no hay ni hubo intenciones ciertas de ver y resolver el problema habitacional que se generó con la inacción y falta de planificación.

Porque planificar en un municipio no solo significa hacer planitos hacia donde y como va a extenderse la ciudad “léase plan estratégico”. Significa comprometer los recursos con que se van a extender los servicios de esas nuevas urbanizaciones y ejecutar las obras necesarias para que sean una realidad en la medida y proporción que se va visualizando el crecimiento de la población, y como toda estimación se la debe hacer de acuerdo a la historia del crecimiento del lugar no en base al crecimiento de Beriso o de La Plata sino de Ushuaia. Así que no nos vengan con explosiones o migraciones masivas que esto siempre ha sido así por estos pagos, menos en un periodo en que ni se tuvo en cuenta el crecimiento vegetativo de la población ya existente.

Si no fuera así no existirían los Fueguinos Autoconvocados, o no?

Otro ejemplo de los antagonismos creados en la ciudad por la actual gestión es el centro vs la periferia. Si no fuera así como se explica que los vecinos del centro tienen paradas de colectivo ilustradas y los demás tienen paradas de chapa? Porque los vecinos del centro gozan de las calles transitables después de las nevadas y los vecinos de la periferia deben esperar días para que su circuito mínimo esté despejado?

Ha querido justificar la creación del Museo de la Ciudad (muy lindo atractivo para el turista) basándose en la necesidad de reconocimiento a esos antiguos pobladores pero ni siquiera fue capaz de invitarlos a la tradicional cena a la que están acostumbrados y esperan con ansias ese día. Parece que también en su gestión hay antiguos pobladores de primera y antiguos pobladores de segunda.


RESUMIENDO: ¡MUCHO DIJO ESTE LUNES EL INTENDENTE!


El intendente dijo TENEMOS QUE RESIGNARNOS AL CRECIMIENTO

Como resignarnos al crecimiento???? O acaso el crecimiento no es algo natural ¿?? No debiéramos vivirlo de esa manera ¿??

Nosotros estamos convencidos de que la historia nos marca como comunidad. ¿Cómo aprender de esa historia para revertir el presente y el futuro si nuestros gobernantes no entendieron todavía la esencia más natural de los pueblos que es la del crecimiento?

Como alentar a andar esos caminos de integración si no empezamos por mostrarles la responsabilidad que les cabe, si cada vez que pudieron decidir sobre el destino de nuestras tierras y por ende del arraigo, la pertenencia, la consolidación de los barrios que son las células de una comunidad, optaron por lo opuesto.

Nuestra ciudad es joven y nuestro crecimiento fue siempre explosivo por nuestra alta tasa de crecimiento y por migraciones masivas, la esencia de todo está en su historia sólo debemos reconocerla y exigir a nuestros gobernantes que estén a la altura de los acontecimientos.

Participemos porque de lo contrario nuestro presente podrá ser soportable pero nuestro futuro será impredecible.

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